Percepción

Dado que el mecanismo más complejo que existe en el universo conocido es la mente, cuando se trate de definirla siempre nos quedaremos cortos y el tratar de explicarnos cómo funciona más, incluso aun siendo tan poderosa la mente tiene serios problemas para analizarse a sí misma por lo que recurre a estudiar otras mentes para comprender la propia.

En nuestro modelo, la mente enlaza los universos material e inmaterial apoyada del cerebro y el espíritu, en el estudio de como el cerebro ayuda a la mente en el mundo material hemos avanzado algo y poco en la parte inmaterial.

Las funciones de la mente donde interviene el cerebro le hemos dado diferentes nombres como “percepción, pensamiento, conciencia, memoria, imaginación, creatividad, razonamiento, aprendizaje, atención, sentimientos, acciones, etc.”

Dependiendo del autor y la materia, estas funciones tienen diferentes nombres y los autores mezclan evidencias con especulaciones y suposiciones para tejer un entramado complicado.

En lo personal me gusta el modelo que usa la inteligencia artificial conocido como agente y se puede aplicar para la mente y todas las funciones conocidas, luego veamos que es un agente.

Un agente es un sistema abierto capaz de responder a su entorno con una lógica “pre escrita” y como sistema tiene una unidad de entrada de donde toma los datos que le interesan o envían, luego los procesa en una unidad de control, apoyado por una unidad de lógica y una unidad de memoria para generar algo en la unidad de salida.

Una primera característica importante de los sistemas abiertos es que intercambian materia, energía e información y están en una situación de no equilibrio esto es tiene un gradiente (diferencia) de temperatura, potencial eléctrico, presión etc.

La mente debe percibir el entorno para la toma de decisiones y por el entorno entendemos el mundo físico que nos rodea, para la cual se auxilia de los sentidos, además percibe el propio cuerpo en su conjunto y el inconsciente.

La cantidad de datos es sumamente grande de ahí que se enfoca en los datos que le interesan y los demás los deshecha, algunos los “mira” de reojo, por ejemplo los sonidos repetitivos tendemos a no tomarlos en cuenta, la vista la enfocamos y no le prestamos atención a lo demás, la temperatura la sentimos una vez y después nos acostumbramos, se puede considerar que cada sentido es un agente y todos trabajan en forma simultánea y envían su información al tálamo con excepción del olfato y de ahí esos datos se van a distintas zonas del cerebros para que transformen estos datos en información dándoles contexto y luego los transforma en conocimiento al darle significancia.

Abajo del tálamo, se encuentra el hipotálamo que está atento a la información de peligro y toma decisiones por si mismo ante un peligro inminente, lo mismo pasa con el sistema nervioso central, por ejemplo, si toma algo que está excesivamente caliente la mano se retira de inmediato sin que medie una orden de la mente.

La percepción de lo que pasa dentro del cuerpo normalmente va al inconsciente que se encarga de regular y reparar todo sin interrumpir al consciente salvo cuando algo se salga de control como en el caso de daños celulares que manda aviso a un agente colocado en el núcleo accumbens que nos “avisa” de que algo está mal dentro de nosotros.

Hay agentes controlando la cantidad de azúcar en la sangre, los niveles de oxígeno, que interaccionan con otros agentes como el que controla el corazón y la respiración para pedirle que bombeé mas sangre cuando se necesita y a la vez que respire más frecuentemente, todo en forma automática.

Los agentes se comunican entre ellos a través de sustancias químicas llamadas neurotransmisores o directamente con señales eléctricas, cada agente tiene uno o varios circuitos neuronales entrelazados en grandes redes neuronales donde comparten neuronas con otros circuitos.

Con el estrés de la vida diaria el hombre moderno ha perdido gran parte de la percepción consciente de lo que pasa dentro del cuerpo muchas veces ignorando las advertencias de que algo anda mal y que está fuera de alcance de la auto reparación.

Pero si la percepción consciente de los que pasa dentro del cuerpo ha disminuido en el hombre moderno, la percepción del inconsciente ha sufrido más al grado de que hay quienes niegan su existencia.

Los datos que surgen de un mundo cada día más complejo no siempre son analizados y comprendidos en el momento y se quedan ahí en el baúl de los pendientes, los agentes que trabajan en el inconsciente, para darnos referencias pasadas de eventos presentes, no siempre son atendidos por la mente, sin embargo, en la noche inician un trabajo de orden y almacenamiento, trabajo que pueden hacer también cuando meditamos entendiendo la meditación como poner la mente en blanco, esto es, dejar de estar llamando al inconsciente y dejarlo trabajar.

Este trabajo de percepción en el inconsciente es de suma importancia porque nos avisa de las piezas que le faltan al rompecabezas de “la realidad” es por eso que en ocasiones nos despertamos con la solución de un problema o la tranquilidad que sentimos después de una buena meditación.

Sintetizando podemos decir que la percepción de la mente es un conjunto de agentes organizados para obtener datos del mundo material, de nuestro cuerpo y del mundo inmaterial de las ideas y pensamientos.