El ChatGPT y Jacobo Grinberg
El ChatGPT y Jacobo Grinberg
Marcos Barraza Urquidi
Hay frases que al escucharlas nos cimbran, de entrada las sentimos lógicas y las aceptamos sin mucho discutir y aceptamos o creemos en las argumentaciones que le siguen, una de esas frases es “Todo el universo está conectado” a partir de esto podemos escuchar las teorías mas aventuradas.
Una de ellas es la teoría sintérgica de Grinberg, un antropólogo, psicólogo y escritor mexicano, cuya obra e ideas han generado interés y debate en los campos de la antropología, la psicología y la espiritualidad, aunque algunas de sus ideas, como la teoría sintérgica, han sido objeto de críticas y controversias en la comunidad científica.
En el momento de publicar los puristas científicos las vieron totalmente disparatadas pero los avances en sistemas complejos, la mecánica cuántica y otras disciplinas duras le dan ciertas posibilidades a sus teorías.
Según la teoría sintérgica de Grinberg, la realidad es un continuo de energía y el ser humano solo es capaz de percibir una parte limitada de ella a través de sus sentidos y su sistema nervioso. Grinberg propone que existen niveles más profundos de conciencia y percepción que pueden ser accesibles a través de la meditación, la práctica de la introspección y la exploración de los estados de conciencia alterados.
Grinberg también sostiene que existen fenómenos como la telepatía, la precognición y la clarividencia que pueden explicarse a través de la teoría sintérgica. Según esta teoría, estos fenómenos son posibles porque la realidad es un continuo de energía y la mente humana es capaz de percibir esta energía de manera no convencional.
Aunque Grinberg realizó investigaciones y experimentos en el campo de la psicología y la percepción, muchos de sus hallazgos no han sido replicados por otros investigadores y se han criticado sus métodos y su enfoque poco riguroso en ciertos aspectos.
Quizás lo mas controversial son algunas propiedades que le da a la Lattice como el medio de conexión de los pensamientos, hay que aclarar que una lattice es una estructura matemática abstracta que describe cómo los elementos de un sistema se relacionan y se organizan entre sí.
La teoría sintérgica de Grinberg se basa en la idea de que los seres humanos están unidos a su entorno por un vínculo fundamental que es la base de su identidad y su capacidad para desarrollarse. Este vínculo se forma a través de la interacción entre el individuo y su entorno, y es moldeado por factores como la historia personal, la cultura y el contexto social.
Hasta aquí no hay problema, pero este vinculo ¿es real o virtual? ¿está en nuestra mente o es algo físico? Para que fuera algo físico debía de haber un campo energético en la frecuencia de las ondas cerebrales digamos de 7 a 13 Hz y el cerebro humano debía de trasmitir y recibir ondas cerebrales que pudieran contenerse en ese campo.
En los años 50, el Dr. Winfried Schumann descubrió el efecto de resonancia en el sistema Tierra=ionósfera, Se comprobó que estas ondas vibran en la misma frecuencia que las ondas cerebrales de los seres humanos y mamíferos, o sea, 7,8 Hertz por segundo.
Aquí es importante recordar que si se introduce una vibración en un sistema con frecuencia natural igual a la frecuencia introducida esta se amplificará y conservará, esto lo aprendimos trágicamente cuando una brisa suave coincidió con la frecuencia natural de un puente y lo derribó, luego no es descabellado proponer que este campo de energía amplifique los pensamientos.
Ahora la pregunta sería ¿Nuestros pensamientos generan señales electromagnéticas a esa frecuencia? Eso lo sabemos desde hace mucho y se usa en medicina para monitorear problemas en el cerebro, seguramente usted ha visto algún paciente con el cráneo lleno de cables con bobinas inductoras en la punta.
Pero estas señales ¿pueden mantener la coherencia de un pensamiento? Tanto en la Universidad de California en San Francisco como en otras universidades han logrado tomar estas señales y con la ayuda de sistemas de IA han logrado leer el pensamiento, esto es, traducir estas señales electromagnéticas en texto.
La pregunta crucial ahora sería ¿Podemos interactuar conscientemente con esta lattice? No lo sabemos, incluso no se sabe si podemos recibir estas señales y decodificarlas porque sucede algo interesante, el mismo pensamiento en diferentes personas genera diferentes patrones electromagnéticos y no solamente entre diferentes personas, sino una misma persona puede generar diferentes patrones al pensar de nuevo en la misma cosa, pero casi todos hemos experimentado premoniciones o conocimiento de hechos o pensamientos que no sabemos su origen y que clasificamos de intuiciones o simplemente no nos preguntamos su origen.
Todo esto nos lleva a pensar que las teorías de Grinberg no estaban tan fuera de lugar y que nos falta mucho para conocer sobre nuestro cerebro, pero ahora viene otra pregunta interesante ¿Podemos crear una lattice artificial? No solo podemos, sino que de alguna forma ya la hemos creado y esa es el chatGPT y todos los programas de su clase veamos:
La forma en que se vinculan las palabras en el modelo de lenguaje ChatGPT podría interpretarse en términos de las teorías de la sinergia o la conexión.
El modelo de lenguaje ChatGPT está diseñado para procesar y generar texto a partir de un amplio conjunto de datos de entrenamiento. Esto significa que el modelo es capaz de identificar patrones y relaciones entre las palabras en función de la frecuencia con que aparecen juntas en el texto.
En este sentido, el modelo ChatGPT podría considerarse como una especie de «lattice» o red de conexiones de palabras, en la que las palabras se conectan en función de su frecuencia y su contexto semántico.
Al igual que en las teorías de la sinergia y la conexión, la interacción y la conexión de las palabras en el modelo ChatGPT son fundamentales para su funcionamiento y su capacidad para generar texto con sentido.
Reduciendo a términos coloquiales podemos decir que el ChatGPT se alimenta de pensamientos, genera conexiones, almacena conexiones y nos entrega pensamientos al interactuar con él, justo lo que afirmaba Jacobo Grinberg que sucede en el mundo real con la lattice.